Vivir una experiencia enriquecedora a nivel personal y profesional, al mismo tiempo que mejora el nivel de inglés es posible gracias al año escolar en Canadá. Aunque cambiar por completo de continente y estudiar en otro país puede ser todo un reto, estos consejos son perfectos para aprender a superar todos los desafíos que surjan durante el año.
El idioma
El primer desafío sin duda es el idioma. Aunque el objetivo del año escolar sea mejorar el nivel de inglés y enfrentarse a una inmersión completa en el idioma, puede resultar intimidante al inicio.
Desde las clases en la escuela hasta las conversaciones diarias en el supermercado, todas serán en inglés, así que es normal sentirse abrumado al principio. Así que, para superar este primer desafío, el mejor consejo es no tener miedo a cometer errores.
La práctica hace al maestro, así que hablar tanto como sea posible es la mejor forma de superar esta barrera. Participar en actividades extracurriculares, hacer amigos locales, unirse a un club de lectura o buscar un compañero de intercambio de idiomas son opciones prácticas para perder el miedo a hablar en inglés. ¡Cuanto más se practique, más rápido se mejora!
Un sistema educativo nuevo
El sistema educativo canadiense puede ser diferente al español. Las metodologías de enseñanza, el tipo de evaluaciones y hasta la dinámica de las clases pueden variar significativamente.
Por eso, investigar cómo funciona el sistema educativo canadiense antes de llegar es una opción perfecta. Además, una vez en Canadá, no hay que dudar en pedir ayuda a los profesores en caso de no entender las explicaciones o cuando se necesite consejo en alguna materia. La mayoría de los docentes son muy accesibles y están dispuestos a ayudar a los alumnos. Otra opción es hablar con otros estudiantes internacionales que ya hayan vivido un año escolar en Canadá.
La nostalgia del hogar
Estar lejos de casa puede ser difícil, especialmente cuando se pasa un año entero en un país nuevo. Extrañar a la familia, los amigos y las comodidades del hogar es completamente normal, sobre todo al principio.
Para superar este desafío lo mejor es mantener el contacto regularmente con la familia y los amigos a través de videollamadas, mensajes o redes sociales. Además, meter en la maleta algunas cosas que recuerden a casa, como fotos, peluches o libros, también puede ser de ayuda. Incluso intentar mantenerse ocupado en actividades escolares y extracurriculares ayuda a superar la nostalgia.
El clima canadiense
Canadá es un país conocido por sus inviernos fríos y largos, por lo que adaptarse a este tipo de clima puede ser todo un reto, especialmente cuando llega la nieve. El mejor consejo es vestirse adecuadamente.
La ropa de invierno de buena calidad, como abrigos, guantes, gorros o botas, se convertirán en el mejor aliado. Aprender a disfrutar del invierno es fundamental, así que apuntarse a actividades como el patinaje sobre hielo, el esquí o simplemente hacer muñecos de nieve pueden ayudar a acostumbrarse al clima.
Hacer nuevos amigos
Establecer nuevas amistades en un entorno desconocido puede ser intimidante. Es posible sentirse aislado nada más llegar a Canadá, especialmente si el carácter es el de una persona tímida o el idioma supone una gran barrera.
Por lo tanto, ser proactivo y participar en actividades escolares y comunitarias es una buena forma de superar este desafío. Los clubes, deportes y eventos escolares son excelentes formas de conocer gente y hacer amigos. Comenzar conversaciones por iniciativa propia y ser uno mismo es la mejor forma de conocer gente. Los estudiantes canadienses son generalmente amigables y están abiertos a conocer personas de diferentes culturas.
Diferencias culturales
Las diferencias culturales pueden ser un desafío inesperado en Canadá. Las normas sociales, las costumbres y hasta el sentido del humor varían, lo que puede llevar a malentendidos o momentos incómodos.
Mantener una mente abierta y ser respetuoso con los locales y las diferencias culturales es fundamental. Aprender sobre sus costumbres locales y hacer preguntas si no se comprenden algunas actitudes permitirá adaptarse con más facilidad.
Aprender a administrar el tiempo y el estrés
Por último, la carga de trabajo y la presión académica pueden ser intensas al principio. Para adaptarse más fácilmente al cambio, se debe administrar bien el tiempo de estudio y conocer poco a poco el entorno para no vivir situaciones estresantes desde el primer día.
Organizar el tiempo de manera efectiva es la clave en este aspecto. Usar una agenda o una aplicación en el teléfono móvil para mantener un seguimiento de las tareas y actividades puede ser esencial para evitar el estrés.
Tomarse descansos y emplear el tiempo en actividades que se disfruten también ayuda a evitar el estrés al cambio. En caso de que la situación resulte abrumadora, se debe buscar apoyo, ya sea hablando con un consejero escolar o con un amigo.
Un año escolar en Canadá es una aventura emocionante y desafiante, a pesar de los obstáculos. Las recompensas de vivir un año escolar fuera son inmensas. Además, tener en mente que, si Canadá no llama la atención como país, también está la opción de estudiar un año escolar en USA y vivir otro tipo de experiencia distinta. ¡Adentrarse en otro país es una opción inmejorable para los estudiantes!