El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN), Joaquín Galve, ha asegurado que “el problema de sobrecarga de trabajo que padece gran número de los órganos judiciales de España no se soluciona sólo con la creación de más unidades judiciales, ya que se hace preciso, ante todo, llevar a cabo reformas estructurales y orgánicas”. Galve indica que sería necesario, no obstante, disponer de un tercer Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción en Estella.
“Dicho lo anterior, y compatible con ello, a nadie se le escapa que contar con el número adecuado de jueces y con un correcto diseño orgánico, son, sin duda, aspectos básicos y esenciales para lograr que la eficiencia de la Administración de Justicia sea la que todos queremos”, ha asegurado Joaquín Galve.
El presidente del TSJN recuerda que en 2014 se crearon tres plazas de Jueces de Adscripción Territorial (JAT), que tras tomar posesión en 2015, desempeñaron funciones de refuerzo y sustitución en juzgados de Pamplona y Tafalla, fundamentalmente en el orden civil, de familia y mercantil. También se contó desde el mes de abril con dos jueces en expectativa de destino, pertenecientes a la 65ª promoción de la Carrera Judicial, que desempeñaron funciones de refuerzo y sustitución en juzgados de Pamplona (civil y mercantil) y Aoiz.
“Aun así, es necesario exponer las necesidades existentes en este aspecto. Son las siguientes: un Juzgado de Familia en Pamplona, un segundo Juzgado de lo Mercantil y un tercer Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción en Estella. Nuevamente, ha de quedar reflejada en la Memoria la preocupación por la situación de los Juzgados de Aoiz. Debe destacarse un ingreso y resolución de asuntos civiles superior al de los juzgados de Estella. Los problemas siguen sin resolverse, por lo que el análisis es el mismo que el realizado los pasados años. Entre sus principales problemas se encuentra, la inadecuada configuración del ámbito territorial de su partido judicial y, como consecuencia de este, la interinidad de la mayor parte de su personal, que en la actualidad alcanza el 100%”, señala Joaquín Galve.
Para el presidente del TSJN “en la actualidad, la plantilla interina ya tiene una cierta estabilidad, lo que ha permitido, en cierta forma, normalizar la capacidad resolutiva de los órganos judiciales, si bien el retraso en la cobertura de vacantes y el acceso en muchas ocasiones de personal sin experiencia ponen en dificultades la buena marcha de los juzgados”.
(Foto D. Navarra)