Trabajadores y trabajadoras de la planta de BSH en Huarte se han concentrado este martes a las puertas de la fábrica para mostrar su solidaridad con la plantilla de Esquíroz y denunciar públicamente el anunciado cierre de dicha factoría, que afectaría a más de 660 personas.
La movilización ha sido convocada por el comité de empresa de BSH Huarte, coincidiendo con el arranque del periodo de consultas del expediente de regulación de empleo (ERE) que la multinacional ha presentado para la planta de Esquíroz. El proceso supone un duro golpe para el tejido industrial navarro, ya que implicaría el despido masivo de toda la plantilla.
Desde la Federación de Industria, Construcción y Agro (FICA) de UGT Navarra, han reiterado su rechazo «absoluto» a lo que califican como una decisión unilateral de la dirección de BSH Electrodomésticos, y han instado a la empresa a valorar alternativas viables. Entre ellas, destacan la posibilidad de introducir nuevos productos con mayor eficiencia energética que podrían fabricarse en Esquíroz con una inversión inicial mínima.
El sindicato ha denunciado que la decisión responde a una estrategia de deslocalización que pretende trasladar la producción fuera de España, despreciando el potencial de una planta «plenamente operativa» y con «personal cualificado».
Las movilizaciones continuarán en las próximas semanas mientras se prolongue el proceso de negociación del ERE, en el que los trabajadores y trabajadoras de Esquíroz pelean por salvar su empleo y el futuro industrial de la comarca.