Entre 1975 y 1978, los arquitectos Carlos Sobrini Marín, Eugenio Aguinaga Churruca y Rafael Echaide Itarte dieron vida al edificio de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad de Navarra. 46 años después, en un acto coorganizado por la Escuela de Arquitectura y el Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro (COAVN) en el marco de la Semana Mundial de la Arquitectura, se ha colocado la placa del DoCoMoMo Ibérico. Esta distinción reconoce el valor de edificios del siglo XX, que forman parte del Movimiento Moderno (1925-1975).
El presidente del COAVN, Santiago Iribarren, inauguró el acto: “Además de ser una obra maestra de la arquitectura, la Escuela de Arquitectura ha sido y es lugar de formación de muchas generaciones de arquitectos, entre los que me encuentro. Empezamos la carrera en el edificio de la Biblioteca en 1977 y en 1978 pasamos aquí. Vimos cómo se construía este edificio que aúna innovación, tecnología, orden, belleza y, además, aporta bienestar, desarrollo, salud y productividad”.
El valor de este edificio trasciende de lo arquitectónico para aquellas personas que pasan sus días en él, tal y como destacó el director de la Escuela de Arquitectura, Carlos Naya: “Es un ejemplo para todos nosotros y para los que estudian en la Escuela de algo que quizá en los momentos de dificultad no es obvio: hacer buena arquitectura siempre vale la pena. Aunque no te lo reconozcan o lo hagan más tarde, es un regalo para la humanidad. Los que habitamos el edificio casi 50 años después, cada día agradecemos a sus creadores el gran regalo que nos hicieron”.
En el acto también intervino el delegado de la Fundación del DoCoMoMo Ibérico en Navarra y profesor de la Escuela de Arquitectura José Manuel Pozo: “Este es uno de los edificios más vanguardistas del registro del DoCoMoMo Ibérico. Su estructura habla de lo que es y de lo que hace, es un edificio en el que se aprende y que en sí mismo enseña; está hecho para el movimiento de la gente, por el boulevard, que es el hogar, el núcleo, el elemento básico. Y, recordando al profesor Álvaro d’Ors, él decía que un estudiante se forma en los pasillos y en las cafeterías. Es una de las mejores escuelas de arquitectura del mundo, precisamente porque tiene lo que necesita para formar universitarios: un grandísimo corredor donde hablar, charlar e intercambiar conocimientos y experiencias”.
Al acto también asistieron, por parte del COAVN: el gerente, Víctor Otero; y la vocal de Cultura, Begoña García, así como parte de la junta directiva y del equipo docente de la Escuela de Arquitectura, y también estudiantes.
35 edificios navarros, 6 de ellos en el campus
La Fundación DoCoMoMo (Documentación y Conservación de la arquitectura y el urbanismo del Movimiento Moderno) Ibérico es una organización internacional cuyo fin es inventariar, divulgar y proteger el patrimonio arquitectónico del siglo XX correspondiente al Movimiento Moderno (1925-1975), en este caso, de España y Portugal. “La Fundación elige el Día Mundial de la Arquitectura para homenajear a estos edificios. Este año se han colocado 34 placas y, desde hace 12 años, en total, la Fundación ha instalado 425”, detalló Santiago Iribarren.
Con el de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra, son 35 los edificios navarros que forman parte del DoCoMoMo Ibérico. En el campus de la Universidad de Navarra en Pamplona se encuentran 6 de ellos: Edificio de Ciencias, Comedores universitarios, Clínica Universidad de Navarra, Clínica Universidad de Navarra Fase II, Biblioteca de la Universidad de Navarra y, ahora también, la Escuela de Arquitectura.