Las mejoras afectarán a la zona de materiales y de compostaje. La planta gestiona al año 35.660 toneladas de residuos
La Mancomunidad de Montejurra afianzará la continuidad de su planta de Tratamiento de Residuos Urbanos de Cárcar con la inversión de casi 1,5 millones de euros. Las obras comenzarán a principios de 2018 y afectarán principalmente a las zonas de reciclaje de materiales y de compostaje. Con estas inversiones, subvencionadas por el Gobierno de Navarra en un 80%, y por el Consorcio de Residuos de Navarra en un 20%, se garantiza la continuidad de la planta: “En principio, el Plan de Residuos de Navarra 2017-2027 planteaba el cierre de esta planta en el año 2019, pero gracias a una labor de negociación y replanteamiento de la Mancomunidad de Montejurra con la Administración Foral y de varias alegaciones al plan, hemos logrado no sólo alargar la vida de la planta, sino dotarla de mejores infraestructuras”, ha explicado hoy la presidenta de la Mancomunidad, Mariví Sevilla Marzo..
En total se invertirán 1.412.084,16 euros, de los que 766.804,53 € serán para la planta de materiales, y 645.299,25 € para la planta de compostaje. Las obras se adjudicarán antes del 31 de diciembre de 2017 y tendrán un plazo de ejecución de seis meses.
En la planta de recuperación de materiales se realizarán las siguientes actuaciones:
1. INCORPORACIÓN DE NUEVOS EQUIPOS DE SELECCIÓN DE PRODUCTOS: equipo de separación balística y equipo de separación óptica doble válvula.
2. READECUACIÓN DE LOS PROCESOS: desmontaje y montaje de equipos y maquinaria, y nuevas cintas transportadoras.
3. READAPTACIÓN DE LOS ESPACIOS: área de puestos de trabajo y áreas de circulación y mantenimiento.
En cuanto al proyecto de la planta de compostaje, incluye las siguientes acciones:
1. NUEVO PROCESO DE AFINO: limpieza de materiales y mezcla con residuos triturados de poda.
2. EDIFICACIÓN NUEVA: para el proceso de biostabilización; albergará un nuevo proceso de limpieza y tendrá más control ambiental.
Estas obras contribuirán a modernizar el trabajo en la planta en general, y en concreto pretenden mejorar:
• el proceso y rendimientos del compostaje
• el proceso de bioestablización y de su potencial de valorización
• el rendimiento de la planta de materiales
• las condiciones de trabajo de los empleados
• las condiciones de limpieza
• la accesibilidad a la información de los procesos en el ámbito de la sensibilización ambiental.
También se pretende disminuir el actual impacto de las aves en las instalaciones y de las materias de proceso.
“Cuando la actual presidencia fue conocedora del riesgo de cierre de la planta, comenzamos a trabajar en una opción real de mejora. Se había planteado un cierre sin tener en cuenta que la cantidad de materiales recuperados en Cárcar es superior al resto de plantas de Navarra. En la Mancomunidad de Montejurra se recogen aproximadamente el 82% de los biorresiduos generados en la zona, mientras el Plan de Residuos recoge porcentajes del 30% para 2020. Es decir, cumplimos con creces y aún con todo, tenemos margen de mejora”, ha argumentado Mariví Sevilla. “La continuidad de la planta de Cárcar es importante no sólo sólo para poder gestionar nuestras basuras, sino también por mantener sus 18
puestos de trabajo directos”, ha añadido la presidenta.
Compromiso para reducir los residuos impropios
Este acuerdo con el Gobierno de Navarra permite a la Mancomunidad mantener la Planta de Cárcar como infraestructura de compostaje y como planta de selección de envases. Además, el Plan de Residuos de Navarra valida el sistema de recogida de Montejurra (distinto al resto de Navarra -con cuatro contenedores en vez de cinco–) al modificarse al alza el nivel de impropios en la recogida selectiva de biorresiduos. Este nivel se ha ampliado hasta el 25 % para 2020 y hasta el 20% a la finalización del plan en 2027, niveles en los que se sitúa actualmente la Mancomunidad.
Para estar a la altura del Plan de Residuos, la entidad supramunicipal ha adquirido el compromiso de mejorar la recogida de residuo orgánico, seguir trabajando la sensibilización ciudadana con talleres y charlas, reducir el porcentaje de residuos impropios (materiales no solicitados, que no corresponden al contenedor donde se han depositado) que llega a la planta y conseguir un mayor rendimiento y un compost de óptima calidad.
