El Área de Medio Ambiente y Movilidad del ayuntamiento de Madrid ha comenzado la restauración del muro histórico de la Casa de Campo en el tramo más próximo al paseo de Extremadura, concretamente entre las calles Doctor Blanco Nájera y Villavieja en el distrito de Latina. Estas actuaciones pretenden dotar al parque de una valla más segura y acorde con sus características de Bien de Interés Cultural (BIC)
También se pondrá en valor el trazado del antiguo cerramiento histórico de esta parte de la Casa de Campo, conocida como la zona del Renegado. Las obras servirán para detener el proceso de deterioro del muro y corregir las patologías observadas como grietas, desprendimientos de piezas cerámicas y defectos en los cimientos. Todo ello con técnicas de restauración acordes con el tipo de aparejo, rejuntado, textura y composición originales. Asimismo se ordenarán los distintos accesos al parque en este tramo.
El muro que se va a reconstruir tiene una longitud de unos 600 metros y se ha dividido en dos fases. La primera, cuyas obras comenzaron a finales del pasado mes de septiembre, se centra en un trayecto de 330 metros y estará finalizada en enero del próximo año. Tiene un presupuesto de 549.734,51 euros asignado a la partida de Inversiones Financieramente Sostenibles. La segunda fase será objeto de un nuevo contrato y rehabilitará el espacio comprendido entre las calles Villavieja y Villamanín.
En esta primera actuación se van a realizar dos clases de obras diferentes. Por una parte, en el tramo comprendido entre las calles Doctor Blanco Nájera y Perdiz se conservará la actual construcción del muro, aunque se va a restaurar para corregir la degradación y los defectos que presenta como el desprendimiento de piezas de cerámica de la albardilla y la presencia de grafitis.
Por otra parte, desde la calle Perdiz hasta la de Villavieja el muro se ha perdido por culpa de varios derribos en las décadas de los años sesenta y setenta del siglo XX. En este tramo se va a levantar una nueva tapia utilizando las técnicas constructivas y materiales tradicionales del cerramiento histórico de la Casa de Campo. Actualmente hay una malla metálica que limita con zonas urbanizadas y ha sido vandalizada en numerosas ocasiones para acceder a la Casa de Campo por puntos no deseados.
La construcción del nuevo muro comenzará con una cimentación que evitará el empleo de hormigón armado. Se procederá al relleno de la excavación con el mortero denominado “cal y canto”, que consiste en una mezcla de cal hidráulica y arena de río lavada vertida sobre una cama de canto rodado y piezas de distinto formato de mampostería caliza, de pedernal o sílex.
Para la construcción del alzado del muro se utilizará el tradicional “aparejo toledano” que intercala hiladas de ladrillo de tejar con fajas de piedra de sílex, unidos con mortero de cal. Los ladrillos se fabricarán con una composición de las arcillas según los modelos de piezas consideradas históricas que se han conservado hasta la actualidad, elaboradas en horno tradicional.
El empleo de estos materiales tradicionales en la cimentación y el muro garantizará una mayor resistencia y durabilidad del conjunto. También se aplicará una pintura decapante para la eliminación de los grafitis existentes y un tratamiento antipintadas.
Cuando finalice la obra se van a instalar dos paneles explicativos que mostrarán la restauración de las partes del muro histórico conservado y el proyecto de construcción de la nueva tapia. De esta manera, la ciudadanía podrá conocer, interpretar y valorar el patrimonio de la ciudad de Madrid.