
Nueva ley de protección animal: cómo afecta a los propietarios, a los criadores y a otros profesionales
No exenta de polémica y tras haber sido aprobada en el Congreso, se prevé que en las próximas semanas o meses entre en vigor la nueva ley de protección animal, que, entre otras muchas obligaciones, supondrá la obligatoriedad de que los dueños de un perro contraten un seguro para mascotas.
Aunque la ley implica muchísimos más cambios normativos, analizamos para nuestros lectores las novedades más relevantes para los amantes de los animales de compañía y para quienes la cría o tenencia de animales forma parte de su actividad profesional.
Las mascotas, “seres sintientes”
En los prolegómenos de la ley se califica expresamente a los animales de compañía de “seres sintientes”.
La nueva norma tiene el objetivo de proteger los derechos y sentimientos de esos “seres sintientes”, imponiendo limitaciones y obligaciones a propietarios, criadores y a cualquier persona que, por razón de su actividad, tenga relación con los animales domésticos.
Los perros de caza, de guarda de ganado, de pastoreo y los utilizados en actividades profesionales están excluidos
En este sentido, están excluidos de la ley los perros que se empleen con los fines indicados, puesto que se considera que, en esos casos, esos animales no gozan de la consideración de mascotas.
Es algo que está levantando ampollas en los sectores más implicados con la cuestión del bienestar animal, puesto que, en la ley, como veremos más adelante, sí que están incluidos los gallos de pelea y los animales de circo, a pesar de que tampoco pueden ser considerados mascotas.
Para tener perro será obligatorio realizar un curso formativo
Cualquier persona que quiera poseer perros tendrá que realizar un curso formativo, de carácter obligatorio y gratuito. La autorización de tenencia obtenida tras realizar el curso será de validez indefinida.
Evaluación de los perros de gran tamaño y de sus dueños
Por otra parte, se pretende sustituir la tipificación de PPP (perros potencialmente peligrosos), que actualmente es distinta en cada comunidad autónoma, por una evaluación individualizada de los animales cuyo tamaño sea susceptible de producir daños personales en un posible ataque.
En ese caso, también será evaluada la aptitud del dueño del perro para poseer y controlar a una mascota de esas características.
Los seguros para mascotas, obligatorios en el caso de los perros
La nueva ley obliga a los propietarios de perros de cualquier raza a contratar seguros para sus mascotas.
Y no hablamos de seguros de cobertura veterinaria, sino de seguros de responsabilidad civil que cubran los posibles daños ocasionados por estos animales a terceras personas, así como al propio dueño.
Además, la cobertura de responsabilidad civil de esos seguros de mascotas deberá ser de una cuantía indemnizatoria suficientemente alta para cubrir todos los posibles perjuicios ocasionados por un perro, incluyendo los accidentes de vehículos, las lesiones graves, las secuelas permanentes e incluso el fallecimiento de una persona.
Estricto control para los criadores de animales
Los particulares no podrán criar ni comercializar animales. Estas labores solo podrán ser ejercidas por profesionales que cumplan con todas las condiciones que garanticen el bienestar animal y que estén inscritos como tales en un registro administrativo.
Las cuantías de las sanciones económicas previstas por incumplir esta nueva norma serán entre 50 000 y 200 000 euros.
No podrán exhibirse animales en establecimientos comerciales
Tampoco podrán exponerse animales vivos en tiendas ni escaparates, aunque los propietarios estén autorizados para su cría y comercialización.
En el caso concreto de gatos, perros y hurones, estos tampoco podrán exponerse al público en ningún tipo de recinto con fines comerciales.
Cuidado con la forma de atender a los animales en los domicilios
El dueño no podrá tener confinados, de forma habitual, a perros y gatos en espacios reducidos, caso de trasteros, patios, balcones o vehículos.
Y ninguna mascota podrá permanecer sin atención durante más de tres días. En el caso particular de los perros, este plazo será de solo 24 horas.
Animales que no pueden adoptarse como mascotas ni mantenerse en cautividad
En la nueva ley se especifica un listado de especies para las que se autoriza su tenencia. Quedan excluidas las especies protegidas y las especies invasoras.
Y aquí también hay polémica, pues entre las especies invasoras se catalogan algunas mascotas tradicionales y de gran aceptación. A modo de ejemplo, en el listado de especies aceptadas no están incluidos los periquitos, los hámsteres ni las tortugas.
Adiós a los circos con animales salvajes
Aunque en muchas comunidades autónomas ya se prohíbe la actividad de circos que exhiban animales y fieras salvajes, la Ley de Protección Animal hace extensiva la prohibición al conjunto del país.
Pero la cosa no se queda ahí: también se prohíbe usar o exponer animales con intenciones lúdicas o culturales. Conque adiós a la presencia de caballos, llamas, gansos o vacas en situaciones tan variopintas como puedan ser las ferias, las cabalgatas, las procesiones o los belenes.
Las peleas de gallos, prohibidas en toda España
Actualmente, las peleas de gallos siguen siendo legales, con muchas limitaciones, en las comunidades autónomas de Canarias y Andalucía.
A partir de la entrada en vigor de la Ley de Protección Animal, esta actividad estará prohibida en todo el territorio nacional, siendo penada con sanciones económicas desde 50 000 hasta 200 000 euros.
¿Y cuándo entra en vigor la nueva Ley de Protección Animal?
Aunque el proyecto de ley ya ha sido aprobado por el Congreso de los Diputados y ha recibido el visto bueno para su tramitación por parte del Senado, aún está pendiente en este último organismo la votación que supondrá su aprobación, con o sin enmiendas.
Si el Senado aprueba la ley tal y como la ha recibido del Congreso, este será el último trámite antes de su publicación en el BOE.
Pero la ley si se aprueba con enmiendas o es vetada, volverá al Congreso, en donde los diputados habrán de ratificar las enmiendas por mayoría simple o levantar el veto por mayoría absoluta.
Por tanto, en función de lo que ocurra en el Senado, no es posible aventurar una fecha exacta de entrada en vigor de la nueva ley. Puede ser cuestión de días o de meses.
Deja una Respuesta