El Partido Socialista de Navarra (PSN-PSOE) defendía en el Parlamento foral la segunda fase del Canal de Navarra como «proyecto estratégico, fundamental para el equilibrio territorial. El agua de la segunda fase no solo es para la agricultura, es también para los municipios que necesitan agua de calidad». Mientras tanto, el Ayuntamiento de Arróniz solicita al nuevo Gobierno foral la elaboración de un estudio sobre la posibilidad de disponer de tierras de regadío regadas por el Canal de Navarra.
La presidenta de Navarra, Uxue Barkos, asegura que el Gobierno foral va a «revisar» el Canal de Navarra «tal cual está definido» porque, según puntualiza, la segunda fase de esta infraestructura «no garantiza agua de calidad y a un precio que no castigue al territorio». Uxue Barkos manifestaba, en respuesta a una interpelación del PSN en el pleno del Parlamento, que la posición de su Ejecutivo es «inequívoca para dar respuesta a las necesidades de agua de calidad, para boca, riego e industria, y va a ser firme en que ese agua no sea cara y no castigue a los ciudadanos».
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